sábado, 19 de marzo de 2011

GADAFI: FIN DE ÉPOCA

De caudillo del Tercer Mundo...

Gadafi llegó a ser uno de los cabecillas árabes más importantes del movimiento de los no-alineados junto con Nasser y Tito. En un mundo, hoy tan lejano, en el que dos superpotencias se enfrentaban en una guerra sin declarar en diversos rincones del planeta y pugnaban por el liderazgo mundial.
Gadafi era, junto con los cabecillas del Frente Nacional de Liberación de Argelia, uno de los políticos revolucionarios más destacados del Norte de África. Financió revoluciones y terroristas por toda la región entre otros a Idi Amín Dadá, el sanguinario tirano, que encontró la ayuda económica que necesitaba para perpetuarse en el poder y para amparar acciones terroristas como el secuestro del famoso y cinematográfico avión isrraelí en el aeropuerto de Entebe.
Fue una época irrepetible, momentos de gloria para tiranuelos absurdos que emergían de las guerras anticoloniales con un manual de la Tercera Vía en una mano y un Kalasnicov en la otra.

...A genocida de su Pueblo

En los últimos años la pátina de revolucionario más o menos idealizado había dejado paso a la verdadera naturaleza de Gadafi, la de un tiranuelo de opereta que vestido con un atuendo de carnaval, este personaje mezcla entre el Che y Rapél, se paseba por el mundo vendiendo su imagen y su petróleo, con un ejército de mujeres y una tienda de beduino.


Su régimen no ha podido resistir al tsunami de libertad que está sacudiendo el mundo árabe y como un alacrán rodeado por las llamas se ha clavado su propio aguijón. Eso es lo que ha hecho asesinando a su propio pueblo. Un régimen que reacciona así ante las demandas de libertad de sus ciudadanos está herido de muerte.
Occidente se dispone a darle la puntilla y entre ellos está nada menos que Zapatero, el adalid de la Paz y de la Alianza de Civilizaciones, ¡vivir para ver!

Editado por Fernando Dutilh
ferdutilh@yahoo.es

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